SHRÍ SHRÍ SHRÍ PÁVANA YOGUÍRAYA
¿Cómo describir a alguien “Indescriptible”?, las palabras no alcanzan, se amontonan en la mente tratando de expresar algo semejante a la realidad, pero no lo logran. Todo lo que se diga es poco para dar una idea real a alguien que no Lo haya conocido. Los que Lo conocieron entienden lo que digo. ¿Quién puede olvidarLo habiéndoLo conocido? ¿Cómo poder describirLo, sin que la vista se nuble por las lágrimas que brotan al bucear en Su recuerdo?, lágrimas de emoción, de devoción, de alegría y de añoranza.
Cómo poder describirLo, si era Shiva mismo entre nosotros. Ni los mil nombres de Shankara alcanzan a describirLo.
Cómo describir a Aquel que está más allá de nuestro entendimiento, del cual solo podemos describir algunas de Sus facetas, ya que no Lo pudimos conocer en su totalidad por nuestras propias limitaciones.
Shrí Shrí Shrí Pávanají es una gran alma que por Su piedad descendió a este plano físico, para que por medio de Sus enseñanzas podamos trascender la ilusión de este mundo. Sabemos por Sus dichos que Lo volverá a hacer hasta que aprendamos la diferencia entre lo real y lo irreal. Este solo acto describe Su generosidad, Su piedad, Su compromiso con lo que hace. Su grandeza. Un verdadero Guru o Sadguru que como Él mismo dijo trabajaba “para el Señor”. Con mucha dedicación y humildad eligió esta ciudad de Santa Fe para disipar las tinieblas de la ignorancia con la luz de Su conocimiento. Quien Lo veía, aunque fuera una sola vez, no se olvidaba de Él, y esto no era por Su vestimenta o Su cabellera, sino por la luz que dimanaba de Su rostro apacible y dulce. Un verdadero yogui, observador, alegre, lleno de energía.
Él era diferente, por Su forma de hablar y de actuar sobresalía entre todos. Su sola presencia hacía que uno sonriera, sin saber porqué, aunque dijera ¿Cómo estás?. Esto solo podía disipar cualquier vano pesar, podía uno olvidar todo, elevarlo podía a uno de la mundanalidad.
¡Qué gran bendición que sea nuestro Maestro! ¡cuántos méritos habremos hecho para tan magna bendición! Siempre estaremos en deuda por todo lo que nos dio. Al pensar en Su grandeza uno se inspira para ser cada vez mejor discípulo, ajustándose a Sus enseñanzas. Que por Su gracia podamos lograrlo, es el mejor tributo que podemos depositar a Sus pies como ofrenda.
Como describirLo si Él es el padre y la madre; es Brahma, Vishnu y Shiva. Él es “Sacchidanada”, Existencia, Conciencia y Dicha Supremas.
¡Gloria a Shrí Shrí Shrí Pávanají!
Lakshmana.
